Organizaciones globales llaman al Gobierno a fortalecer santuario de ballenas de Chile

Más de 80 agrupaciones nacionales e internacionales se sumaron a la carta masiva para proteger a los cetáceos.

A quince años de la promulgación del santuario de ballenas de Chile, más de 80 organizaciones nacionales, regionales e internacionales se unieron para entregar al Presidente Gabriel Boric una carta que busca la protección efectiva de los cetáceos.

El llamado espera fortalecer la implementación de medidas que resguarden la protección de estas especies y evitar la extinción de la pequeña población de ballena franca austral del Pacífico suroriental.

En una misiva entregada en el palacio de La Moneda por representantes del Centro de Conservación Cetácea y el Centro Ecoceanos realizaron un urgente llamado de atención sobre las muertes de ejemplares de ballenas franca austral registradas en los últimos años en aguas chilenas, incluida una cría de pocos meses de edad, debido a las operaciones de pesca y de salmonicultura intensiva.

Ballena franca austral: símbolo de la lucha ciudadana

La población de esta especie en el Pacífico suroriental se encuentra clasificada en “Peligro Crítico", pues se estima que sólo quedarían menos de 50 individuos maduros, por lo que cada muerte atribuida a causas humanas podría significar su extinción.

En la carta, las organizaciones señalan como los principales factores que afectan a estos cetáceos, los enmalle con artes de pesca y las redes anti-predadores de las balsas de los centros salmoneros, así como las colisiones con embarcaciones y la degradación del hábitat, entre otros.

"Estudios genéticos han revelado que esta población sería única y diferente a las poblaciones del atlántico suroeste o del Indo-Pacífico. La población de Chile-Perú estaría aislada de las demás, haciendo su recuperación aún más vulnerable pues no existiría posibilidad de repoblamiento”, detallan en el documento.

En este sentido, las organizaciones ciudadanas enfatizaron la importancia de conservar a estas especies en aguas chilenas, junto con reiterar en la carta que la ley que estableció el santuario de ballenas de Chile cuenta con un marco regulatorio para proteger estos espacios claves.

El tráfico marítimo

Las más de 80 organizaciones civiles de más de 20 países solicitan en la carta al Presidente Gabriel Boric fortalecer y hacer cumplir lo establecido en el santuario de ballenas, como regular el tráfico marítimo y reducir la velocidad de navegación en zonas de avistamiento.

Así también, regular las prácticas pesqueras y de acuicultura industrial intensivas, para evitar enmallamientos directos y eliminarla creciente contaminación química, entre otras medidas.

En el documento presentado además se solicita reforzar la aplicación de la normativa vigente para el avistamiento de cetáceos, penalizando la observación embarcada y/o el acoso a ejemplares de ballenas franca austral y establecer áreas protegidas móviles y temporales alrededor de los animales.

El urgente cumplimiento de la ley

La directora del Centro de Conservación Cetácea y coordinadora de la campaña Chile 2008, Santuario de Ballenas, Elsa Cabrera, señaló que espera que la respuesta sea positiva por parte del Presidente para poder efectivamente conservar a las ballenas.

“Este es un contundente llamado de parte de millones de personas representadas por más de 70 organizaciones civiles de todas las regiones del planeta sobre la urgente necesidad de dar cumplimiento efectivo a las medidas de protección establecidas en la ley de protección a los cetáceos de Chile”, enfatizó.

Por su parte, el director ejecutivo del Centro Ecoceanos y también coordinador de la campaña para la creación del santuario de ballenas de Chile, Juan Carlos Cárdenas, reiteró la importancia de fortalecer la ley y cumplir con los estándares internacionales. 

 “El Gobierno del Presidente Gabriel Boric tiene la responsabilidad frente a la comunidad internacional de implementar las recomendaciones del Comité Científico de la Comisión Ballenera Internacional, de controlar las interacciones letales entre ejemplares de ballenas francas australes", explicó.